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Me inicié en este mundo de publicar en línea, con un blog mimado, especial, ganador. Sin embargo fui descubriendo que me limitaba mucho, el tema es muy específico y delicado, no admite entradas no relacionadas. No podía escribir sobre otras cosas. Y dicen que cuando uno abre un blog, abre otro y otro. En realidad es como cualquier autor que escribe un libro y luego ha de “parir” uno distinto y así va teniendo más hijos, frutos de los pensamientos que uno necesita dar a luz.

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domingo, 14 de agosto de 2011

Sentido común, el menos común de los sentidos

Leí, consulté, asistí a seminarios y charlas donde se suponía que aprendería que decir y que no en línea. Ya sea en las redes sociales, blogs y lo que fuera. La mayoría estaban  dedicados  a gente que entiende de todo. Era como esas solicitudes de crédito, donde para acceder a uno, hay que demostrar que no los necesitas.  Nadie le hablaba a los “novatos” y yo era eso. Era una recién llegada. Si bien es cierto que tenía un poquito más de conocimiento de informática que el común de mis coetáneas,  todo era nuevo para mí. Y empecé a sentirme “discriminada” (esa palabra está muy de moda, tenía que usarla). Según mi humilde punto de vista hay que tener un poco de sentido común.

Algunos consejos recopilados de muchos gurús y reinterpretados :
  • No digas lo que no quieras que lo sepa todo el mundo. No te quejes si después hacen una novela de tus frases. (Ya me pasó)
  • Cuando empieces a complicar tus muros y tu línea de tiempo de Twitter, con quejumbrosos problemas emocionales, corres mucho riesgo de que escondan tus publicaciones o directamente te eliminen, o a lo mejor te pilla un buen predicador y no te dejará en paz hasta conseguir tu expresa felicidad on line.

  • A nadie le gusta que corrijan sus errores en público, no lo hagas en los muros de Facebook!
  • Cuando envías una felicitación, no etiquetes a todos tus amigos en una misma tarjeta, es de mal gusto. Nada más cálido que un saludo personal.  
  • No intentes vender etiquetando a la gente en las fotos de tus productos.

En Twitter
  • No es lindo pedir que te sigan ofreciendo un seguimiento a cambio. Rompe con el concepto de Twitter . La gente debe seguirte y prestarte atención porque le agrada lo que decís, no por obligación. Esos seguidores obligatorios solo son números, no son seguidores reales, no los necesitas.

Las cosas técnicas se aprenden, pero por sobre todo está el sentido común.
Tener muchos seguidores no te hacen más importante en el mundo real. Las personas con más seguidores generalmente vienen de otros medios, con un perfil notorio desde antes de llegar a las redes sociales. (a menos que seas Mark Zuckerberg, Jesús Checa o Yoani Sanchez) sin intención de desanimar a nadie, en su búsqueda de la fama on line.
Y para terminar les pido algo: si no están de acuerdo, no me reten, siempre tengan en cuenta mi miopía y astigmatismo. 
Si están de acuerdo o tienen algo mas que agregar recibo comentarios cariñosos y con buena onda , los demás los borro. jeje